Restart!

Puedes hablar de lo que quieras.
Mi coraza de vida repele tantas cosas...
No te haces una idea de lo fácil que se me hace desconectar el cerebro cuando lo necesito.
Cuando te empeñas en contarme algunas de tus noches.
Cuando te apetece detallarme el color de algunos ojos o cuántos labios te besaron el último mes.
Soy inmune. Y, lo peor, es algo que ya no me preocupa.
Me pudieron las ganas, a lo mejor. Las ganas de admirar un cuadro que no estaba aún acabado; de una canción casi sin letra, escrita a lápiz, con algún que otro borrón al margen.
Me olvidé por el camino que no tengo que demostrarle nada a nadie... que las cuerdas que se tensan demasiado acaban rompiéndose.
Siempre tuve esa sensación... pero ahora el miedo ya se fue.
Tengo que agradecerte, después de todo... porque sin ti esos fantasmas aún seguirían rondando los pies de mi cama... pero, por fin, se fueron :)
Sabes...
Me equivoqué.
Y después de varios días nublados dándole vueltas a la cabeza, sopesando, analizando e intentando comprender he llegado a la conclusión de que no... No merece la pena.
No te (me) mereces.
Y ahora es a mi a quien no le apetece merecer(se/te).
Siento haberlo confundido todo.
Pero aquí estaré. Para todo lo demás.
Sin duda. Ya me conoces, un poquito :)


Restart!